Cuando se refiere a VINOS va más allá de examinar solo el sabor. En español, hablamos de CATAR UN VINO para determinar, juzgar o valorar sus características organolépticas en cuanto al aspecto, olor, sabor y conjunto total, ya que también se puede examinar su sensación en boca, textura y el tipo de post gusto que nos deja.
rueda de aromas/sabores |
Para esto, primero hay que estudiar mucha teoría, luego visitar a productores, lugares, ferias, bodegas y probar, probar, probar y probar cientos de vinos de todos los países del mundo donde más de 7 millones de hectáreas están dedicadas a cultivar uvas para elaborar vino en ambos hemisferios del mundo. Con todas estas acciones conseguiremos fijar información, datos y referencias en nuestro cerebro para posteriormente poder reconocer aromas y sabores cuando se nos presenten vinos, sin etiquetar, para determinar y valorar.
Como digo, hay que prepararse a fondo ya que se trata de un trabajo muy exigente, aunque si lo tomamos con un hobby o divertimento puede ser un juego muy divertido mientras ejercitamos nuestra memoria y aprendemos de sabores, aromas, geografía, cultura, formas de vida y mil cosas más.
Las catas a ciegas pueden ser en un copa negra donde no se ve el contenido o poniéndose un antifaz. En estos casos son realmente a ciegas porque no se ve ni la botella con su marca ni el contenido de la copa por lo que hay que examinar para "adivinar" y descubrir el enigma de todo lo mencionado anteriormente sobre el vino, no por azar sino por deducción de los parámetros citados.
Otra forma de catar a ciegas es pasando el vino a otros formatos o tapando la botella y verter el vino en copas transparentes donde, al menos, tenemos pistas por el aspecto y color, lo cual ya será una importante hoja de ruta para determinar el vino en cuestión.
Así que ya sabéis, si os gusta el vino y pasar un buen rato mientras vuestro cerebro se activa y genera más conexiones neuronales, no dejes pasar la oportunidad de jugar mientras pruebas vinos (con moderación) y descubres cual te gusta más. Puedes llevarte muchas sorpresas.
¡Tu paladar y tu cerebro te lo agradecerán porque la vida sabe mejor con vino! ¡¡SALUD!!